domingo, 14 de agosto de 2011

Los accidentes de tráfico pasan por primera vez a ser la segunda causa de ingreso por lesión medular

Datos publicados por el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo muestran como entre los ingresos realizados en el año 2010 en su centro, los accidentes de tráfico han pasado a ser, por primera vez, la segunda causa de lesión medular.

Las caídas superan, por primera vez en la historia del Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo, a los accidentes de tráfico como causa traumática de lesión medular que originó el ingreso a lo largo del año 2010. Datos publicados en la revista Infomédula, que edita el propio centro, han permitido conocer que de los 282 pacientes nuevos que ingresaron el pasado año por lesión medular espinal el 25% habían sufrido caídas, el 21% fueron víctimas de tráfico, un 5% sufrieron la lesión a consecuencia de un accidente laboral y otro 5% se lesionaron durante la práctica de actividades deportivas. El 44% restante ingresaron con una lesión medular espinal originada por una enfermedad.

Entre los datos publicados por el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo, que constituye el centro de referencia en España en rehabilitación integral de la lesión medular espinal, están también el de una mayor prevalencia de secuelas de paraplejía (60%) frente a tetraplejia (40%), mayor presencia de hombres (66%) que de mujeres (34%) entre los ingresos del pasado año, y más casos de lesiones incompletas (68%) que completas (32%), es decir que han afectado a toda la médula espinal. La información facilitada por la Dirección Médica del hospital manchego señala que el porcentaje más numeroso de ingresos se da en la franja de edad de 60 a 74 años, seguido muy de cerca por los intervalos 45-59, 30-44 y 15-29.

Los ingresos motivados por las secuelas de un accidente de tráfico pasaron el pasado año a ser por primera vez la segunda causa en el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo, un cambio de tendencia que se puede relacionar directamente con los datos del Balance de Seguridad Vial 2010 en los que se apuntaba una reducción del 8,7% en el número de accidentes (148 menos); de un 9,1% en la cifra de víctimas mortales (173 menos) y de un 11,4% en heridos graves (1.021 menos).

El Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo distinguen entre los ingresos que tienen como origen un accidente de tráfico aquellos en los que ha estado implicado un automóvil (63%), los que tienen como elemento principal una motocicleta (25%) y aquellos en los que el vehículo ha sido otro (2%). Existe además un 10% adicional de ingresos por lesión medular espinal a consecuencia de un atropello. A la vista de estos datos y de los que el hospital publica anualmente, este centro participa activamente -especialmente en épocas como la estival- en las campañas de prevención de conductas, como el consumo de alcohol o el exceso de velocidad, que pueden derivar en un accidente de tráfico.

El peligro de las zambullidas
El verano es también la época elegida por el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo para realizar anualmente una campaña en la que quiere recordar que el mayor número de las lesiones medulares sufridas durante la práctica deportiva -en 2010 un 5% de los ingresos realizados- corresponde a zambullidas imprudentes en playas o piscinas. Con el objetivo de reducir este tipo de lesiones, en este verano de 2011 el centro manchego está llevando a cabo una campaña informativa que, bajo el lema ‘Piénsatelo. No vayas de cabeza’, recuerda a los bañistas la necesidad de “una actitud de prudencia a la hora de lanzarse a una piscina, en el río o en el mar, ya que una mala zambullida puede tener consecuencias tan negativas como una lesión medular”.

Profesionales del Servicio de Rehabilitación y del Servicio de Medicina Interna del Hospital Nacional de Parapléjicos aconsejan seguir unas normas básicas para prevenir los accidentes por zambullidas imprudentes, atendiendo a cuestiones como no tirarse de cabeza en un paraje desconocido, si el agua está turbia y no hay visibilidad inspeccionar previamente la zona para comprobar su profundidad y que no haya elementos sumergidos como rocas, árboles u otros objetos contra los que se puede impactar, o conocer la profundidad de una piscina, un río o el mar sobre todo en relación con altura desde la que uno se sumerge.

El bañista ha de zambullirse con los brazos situados en prolongación del cuerpo, protegiendo el cuello y la cabeza, recuerdan los profesionales médicos, que también señalan que es recomendable no saltar de cabeza desde demasiada altura ya que una mala técnica de entrada puede causar lesiones tan solo en el golpe con el agua. Por norma general deberá haber más de 1,5 metros de profundidad si se va a saltar de cabeza y si el bañista se lanza desde una mayor altura, la profundidad también tiene que ser mayor. En lugares naturales como ríos, lagos, mar o embalses es preciso recordar que los niveles del agua pueden variar de un día para otro por las mareas, aperturas o cierres de compuertas, por lo que es conveniente comprobar siempre la profundidad.

Por otra parte, los especialistas recuerdan que en caso de que se produzca un accidente, y ante la necesidad de la recogida y manipulación de la víctima, es muy importante inmovilizar el cuello, evitar movimientos de la columna y avisar a un profesional para que realice el traslado. No se debe transportar al lesionado en un vehículo utilitario.

Fuente:
OED - Observatorio Estatal de la Discapacidad

1 comentario:

Sara Ramos | Alquiler de Camas Articuladas dijo...

Buenas tardes:

Debemos de aportar mas información a los usuarios, y mejorar la educación para prevenir estos accidentes.

La labor que desde asociaciones como Aspaym realizan formando en colegios,charlas, eventos,..etc,..es fundamental para reducir el numero de personas que quedan afectadas por lesiones medulares.

Quizás no hay nada más terapeutico que te cuenten una verdad en primera persona.

Un saludo,

Sara Ramos
Terapeuta Ocupacional