Las barreras arquitectónicas de los intercambiadores del Metro de Barcelona -estaciones donde confluyen dos o más líneas- retrasarán la adaptación completa del suburbano para los discapacitados y los ancianos hasta el 2014, aunque en un principio se preveía totalmente accesible para 2012.
Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) se había marcado los dos próximos años para tener una red totalmente accesible, frente al actual 82%, en aplicación del Plan Director de Accesibilidad Universal.
Fuentes de TMB han asegurado que todos los intercambiadores están adaptados, excepto Espanya (L1 y 3), Plaça de Sants (L1 y 5), Urquinaona (L1 y 4), Clot (L1 y 2), Verdaguer (L4 y 5), Maragall (L4 y 5) y parcialmente Passeig de Gràcia (L2, 3 y 4).
Las conexiones con otros transportes, como Renfe, también son una asignatura pendiente, aunque empieza a revertirse.
Las obras para adaptar la conexión entre el Metro y la estación de Renfe del Passeig de Gràcia empezarán el 15 de enero, con la instalación de ascensores hasta la calle y la supresión de escalones en los pasillos, por lo que en un año "se suprimirán absolutamente las barreras arquitectónicas", ha avanzado el concejal del Eixample, Ramon Nicolau.
Europa Press
Barcelona
No hay comentarios:
Publicar un comentario